Carolina Outón se ubica dentro de la pintura actual como una artista plástica contemporánea que retoma la problemática social y la conjuga con un estilo artístico moderno que se vincula fuertemente al Expresionismo Social. Como pintora argentina sus intereses se han ido orientando hacia la exaltación de los sentimientos más primarios del ser humano y también de los animales. En sus pinturas, tanto las personas como los animales son valorados como seres sintientes, sin ser clasificados sino interpretados en su singularidad. Es así que en sus obras un perro o un gato son también abordados por el enfoque social no cómo mascotas.
El conjunto de sus expresiones artísticas también está imbuido de un sentimiento que le otorga a la presencia femenina una importancia crucial. Sin duda se enmarca en un movimiento de mujeres artistas latinoamericanas e ibéricas que se desempeñan en pintura y a las artes visuales en general.